Agencia sin inteligencia
Oct. 05, 2025
Luciano Floridi, conocido por sus aportes a la filosofía y a la ética de la información, ha publicado un artículo en el que propone conceptualizar a la inteligencia artificial como "agencia sin inteligencia" (2025). Este trabajo es un aporte importante al debate sobre la naturaleza e implicaciones de las nuevas tecnologías denominadas como inteligencia artificial (IA). Supone un cambio conceptual fundamental: dejar de imaginar a la IA como inteligencia humana, y verla en forma más concreta como agencia, es decir en su capacidad de interacción autónoma y adaptativa.
Inteligencia implica conciencia, estados mentales e intencionalidad. En cambio, la IA opera como un sistema computacional definido por parámetros humanos, sin capacidad de verdadera comprensión o autodeterminación. Es incapaz de generar propósitos y elecciones originales. Es un sistema confinado a operar dentro de marcos preestablecidos.
Sin embargo, la falta de inteligencia no implica la ausencia de agencia. Tres criterios pueden ser considerados fundamentales para la agencia: interactividad, es decir la capacidad del agente de alterar y ser alterado por su entorno; autonomía, en el sentido de poder cambiar de estado, de iniciar o dirigir una acción sin una causalidad externa directa o inmediata; y adaptabilidad, o sea la capacidad del agente de modificar su comportamiento. Los sistemas de IA cumplen con estos criterios.
Para comprender la IA como agencia, esta puede ser comparada con otras formas de agencia. Un río ejerce una agencia natural sobre su entorno a través de interacciones físicas. Un perro muestra una agencia biológica por medio de comportamientos complejos y funciones cognitivas avanzadas. Una colonia de hormigas exhibe una agencia animal social por medio de patrones de acción colectiva sin una estructura formal. Un termostato representa una agencia artefactual al controlar autónomamente la temperatura dentro de la funcionalidad con que fue diseñada. Y ciertamente, los seres humanos, quienes representan la más compleja y avanzada forma de agencia, a nivel individual y social.
La agencia artificial resulta de la interacción entre objetivos programados y comportamientos aprendidos. Tiene naturaleza informacional, ejerciendo influencia en el entorno por medio del procesamiento continuo, escalable y distribuido de datos. Se adapta por medio del reconocimiento de patrones estadísticos. Además, la agencia artificial es reproducible y pueda actuar en forma colectiva, por medio de redes coordinadas.
La conceptualización de la IA como agencia artificial, sin inteligencia, tiene importantes implicaciones éticas y sociales. En primer lugar evita la asignación errónea de atributos, contrarrestando la propaganda de la IA como la evolución o el desplazamiento de la inteligencia humana. Con las características descritas, se puede clarificar su gobernanza y regulación. Y esto sienta la bases para demandar transparencia, responsabilidad y rendición de cuentas en el diseño y uso de sistemas de IA.
Referencia:
- Floridi, L. (2025). AI as Agency without Intelligence: On Artificial Intelligence as a New Form of Artificial Agency and the Multiple Realisability of Agency Thesis. Philosophy & Technology, vol. 38. https://link.springer.com/article/10.1007/s13347-025-00858-9